Intro.

Una mañana, como otro día cualquiera un rayo de sol se coló por una rendija de mi ventana. Dio de lleno en mis ojos. La resaca era tremenda, no tengo ni idea de lo que pasó ayer. Solo recuerdo la fiesta en casa de Amy, con su novio Harry. No me apetece pensar, me duele todo. Me giro en cama y abro los ojos. No, no no no no no no! Pero qué está haciendo el en mi cama?! Pero... Necesito comprobarlo. Levanto un poco las sábanas y el edredón. No me lo creía, más bien no queria creerlo... Había perdido la virginidad, en una noche, con él! Sin poder evitarlo salto de la cama y me visto un camison de seda y encaje con la bata por encima. Esto tengo que contarselo a Amy! Bajo a toda leche las escaleras, tanto que casi me caigo de frente. Cuando llegué al salon vi toda su ropa encima del sofá. Un momento, no recuerdo nada, usariamos protección? Espero. Vuelvo escaleras arriba. Busco desesperada un envoltorio de preservativo. No lo encuentro. Las dudas invaden mi mente, chocándose unas con otras. Suena el timbre. Bajo desganada las escaleras, me paro ante el espejo y veo mi rostro, está palido. Me recoloco un poco el pelo y abro.
X:Cris!-Se avalanza sobre mi- te he echado de menos.-besa mi comisura.
Yo: Hola...
X: Que pasa? Ya no te acuerdas de mi?-dice entrando y guiñandome un ojo.
Yo: Dougie, que haces aqui?!
Doug: Pues no mucho, paseaba por Londres y dije "Que mejor que hacerle una visitilla a mi ex?"-me dijo con ironía mientras le daba vueltas a una roja manzana.
Yo: Fuera.